Juliano, el ventrílocuo del pueblo

7 de enero de 2015


Hemos hablado ya en este blog de los grandes ventrílocuos españoles de principios del siglo pasado: Paco Sanz, Eugenio Balder o Felipe Moreno, sin olvidarnos de su hermano menor Wences, el Señor Wences, cuya triunfal carrera, lejos de España, se prolongó hasta 1996, gracias a su extraordinaria longevidad.

Pero no podemos olvidarnos de Julio Salcedo Marín (Madrid, ? - 1932), Juliano, un artista que empezó como payaso de circo y que acabó dedicándose a la ventriloquía, y vinculado a los comienzos del cine en España, como animador, con sus autómatas, de los intermedios de las proyecciones las cortas películas de la época, cuya trama iba luego explicando al público (lo que ahora llaman pomposamente en Canal Sur Televisión película audiodescrita). Así se le encuentra actuando en 1904 en el Nuevo Salón Mágico, de Madrid, en una época en el que aquellas primeras películas se integraban como una pieza más dentro de un espectáculo de variedades.

Pero sus actuaciones no se limitan a este tipo de veladas y, por ejemplo, la revista Nuevo Mundo le dedica un elogiosísimo artículo en su número 631 del 8 de febrero de 1906. Por él sabemos de su gran popularidad, especialmente entre la clase más baja del Madrid de aquellos días, y conocemos el nombre de algunos de sus muñecos: el Tío Roque, un socarrón personaje de pueblo; Ninchi, un niño un tanto ingenuo que, por su atuendo, podemos identificar con un pijo de la época; y Pepito, otro personaje infantil que sospechamos que debía de ser el contrapunto de clase baja de Ninchi. En las fotografías, Juliano luce el inevitable bigote de los ventrílocuos de aquella época, antes de que Balder decidiera afeitárselo, y aparece acompañado por otros de sus fantoches, cuyos nombres desconocemos: una pareja aristocrática y un personaje de raza negra, que parece ser un cantante cubano.

En 1910 interviene como ventrílocuo en la inauguración del Salón de los Hermanos Vega, en Bilbao.

Y poco más se sabe de él, ya que se vio sobrepasado por las arrolladoras irrupciones de Paco Sanz y de Balder, que conviertieron su estilo en anticuado.

Para saber más:

  • Fernández, Luis Miguel.
    "Una figura desconocida del espectáculo finisecular español: el explicador de películas", en Literatura modernista y tiempo del 98: actas del congreso internacional, Lugo, 17 al 20 de noviembre de 1998, página 224.
    Universidad de Santiago de Compostela, Servicio de Publicaciones e Intercambio Científico, 2000.
    ISBN: 84-8121-853-7.
  • "Espectáculos populares - El ventrílocuo Juliano".
    Nuevo Mundo (Madrid), num. 631, 08/02/1906, página 12.
  • Otros ventrílocuos - El fabuloso mundo del ventrílocuo Paco Sanz.
  • Ramos Altamira, Ignacio.
    El mejor ventrílocuo del mundo. Paco Sanz en los teatros de Madrid (1906-1935), páginas 31, 32 y 33.
    Editorial Club Universitario, 2010.
    ISBN: 978-84-9948-134-0.

5 comentarios

  1. Muchas gracias Isabel. Me ha hecho mucha ilusión leer este artículo sobre mi bisabulo, Juliano Salcedo. Un saludo.

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  3. Gracias Isabel por el articulo dedicado a Juliano por completar datos, nació en 1870, posterior al articulo de Nuevo Mundo, en uno de sus viajes por América del Sur, naufrago en el Amazonas estuvo desaparecido durante un año, lo acogieron los Jivaros para curarle de unas fiebres, después apareció cuando ya se le daba por muerto. es mi bisabuelo y mi nombre es Manuel Salcedo 14-02-2016. Tubo otro muñeco llamado Cepa un gracioso borrachin. Saludos

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